No hay libro, por malo que sea, que no contenga algo bueno

Los Primeros de Huelin

En este blog vamos a poner en práctica algunas de las cosas que aprendamos en clase. Vamos a escribir pequeños relatos (uno al mes).
Deberán tener una extensión máxima de 25 líneas (letra arial; interlineado sencillo; tamaño 12; márgenes de 2,5 cm.).
Yo pondré una entrada con la primera frase del relato y vosotros tendréis que continuarla. Deberíais escribirlo en un archivo y cuando lo tengáis escrito, subirlo al blog como un comentario a la entrada.
Lo que está completamente prohibido es leer los relatos de los compañeros y no escribir nada.
¡Ánimo!

miércoles, 18 de mayo de 2011

Soneto - Junio 2011

Para terminar con el trabajo del blog, vamos a componer un soneto. Acordáos de repasar la teoría. Se valorará que la medida de los versos sea correcta, que la rima la adecuada y que contenga al menos una metáfora, un símil y una personificación.
¡Adelante, artistos y artistas!

domingo, 27 de marzo de 2011

Fábula en verso - Marzo / Abril 2011

A continuación puedes leer una fábula de Esopo, escrita en prosa. Se trata de que, aplicando lo que hemos estudiado de la fábula y del verso, escribas una versión en verso. Los versos deben tener el mismo número de sílabas y deben rimar.
Tenemos de plazo hasta el 30 de abril, de manera que esta actividad cuenta para la 3ª evaluación.

A buena altura sobre el bosque, ocultos tras la densa pantalla de las nubes, el sol y el viento discutían sobre cuál de ambos era más fuerte.
-Mis rayos son tan poderosos que puedo chamuscar La Tierra hasta reducirla a negra yesca reseca -mantenía el sol.
-Sí, pero yo puedo inflar mis mejillas y soplar hasta que se derrumben las montañas, se astillen las casas convirtiéndose en leña y se desarraiguen los grandes árboles del bosque -replicaba el viento.
Mientras estaban sentados disputando, salió del bosque un granjero. Vestía un grueso abrigo de lana y llevaba calado un sombrero.
-¡Te diré lo que vamos a hacer! -dijo el sol-. El que pueda arrancarle el abrigo de la espalda al granjero, habrá probado ser el más fuerte. -¡Espléndido! -bramó el viento. Tomó aliento e hinchó las mejillas como si fueran dos globos.
Luego, sopló con fuerza... y sopló... y sopló. Los árboles del bosque se balancearon. Hasta el gran olmo se inclinó ante el viento cuando éste lo golpeó sin piedad. El mar formó grandes crestas en sus ondas, y los animales del bosque se ocultaron de la terrible borrasca.
El granjero se levantó el cuello del abrigo, se lo ajustó más y siguió avanzando trabajosamente.
Sin aliento ya, el viento se rindió. Luego, el sol asomó por detrás de la nube. Cuando vio la castigada tierra, navegó por el cielo y miró con rostro cordial y sonriente al bosque que estaba allá abajo. Hubo una gran serenidad y todos los animales salieron de sus escondites.
El granjero alzó los ojos, vio el sonriente rostro del sol y, con un suspiro de alivio, se quitó el abrigo y siguió andando.
-Ya lo ves -dijo el sol al viento- A veces, quien vence es la dulzura.

martes, 18 de enero de 2011

La narración - Enero 2011

En esta entrada escribiremos una anécdota que nos hayan contado nuestros padres o abuelos. Atención a las concordancias y las relaciones temporales entre los hechos que contamos.

martes, 11 de enero de 2011

La descripción - Enero 2011

Para este segundo texto descriptivo es conveniente repasar e intentar poner en práctica lo que hemos estudiado en clase.

Habíamos comenzado a caminar muy temprano. El pueblo de Capileira aún dormía cuando comenzamos la ascensión al Mulhacén por la cara sur. El camino era largo pero no demasiado pendiente y el día se presentaba soleado. Al poco de superar la barrera que impide el acceso con coche al Parque Nacional, un paisaje espectacular se ofreció ante nuestros ojos...

miércoles, 15 de diciembre de 2010

La descripción - Diciembre 2010

Vamos a escribir un texto en el que predomine la descripción.
Recordad que es necesario trabajar mucho con los sustantivos y los adjetivos.

Al entrar en el aula descubrí que faltaba una de las mesas, pero no la silla. Era una mesa...